¿Sabías que la Organización Mundial de la Salud (OMS) subraya que el envejecimiento saludable es un derecho y una prioridad global? Para lograrlo, es clave seguir un proceso de revisión integral de todos nuestros hábitos, entre los que se incluyen por ejemplo el deporte. En GO fit dedicamos muchos esfuerzos a garantizar la mayor calidad de vida posible a nuestros socios y entre ellos se incluye el contar con actividades deportivas enfocadas en personas mayores de 60 años. Y es que, adaptar la rutina deportiva a cada franja de edad es clave para obtener los máximos beneficios.
¿Qué entendemos por envejecimiento saludable?
Si seguimos tomando de referencia a la OMS, esta organización define el envejecimiento saludable como el proceso de fomentar y mantener la capacidad funcional que permite el bienestar en la vejez. Esta capacidad funcional consiste en contar con los atributos que permiten a todas las personas ser y hacer lo que para ellas es esencial. Una de nuestras obligaciones si queremos ser independientes y fuertes a lo largo de los años, es intentar mejorar día a día nuestra calidad de vida. Y existe una forma de medir esta calidad de vida individual, la escala WHOQOL-100, que señala aspectos como el bienestar físico, emocional, las relaciones interpersonales o la autodeterminación. Por último, es importante señalar que disfrutar de un envejecimiento saludable no implica que se tenga ninguna enfermedad o limitación física. Se trata más bien de la capacidad de adaptarse y sobrellevarlas.
Teniendo en cuenta los parámetros de la escala mencionada, el factor que más influye en la capacidad de disfrutar de un envejecimiento saludable es el que nos ayuda a llevar un estilo de vida sano, mediante una alimentación equilibrada, la práctica habitual de actividad física, una buena rutina de sueño y sobre todo el evitar hábitos perjudiciales como fumar o consumir alcohol en exceso.
Otras estrategias claves para este desarrollo óptimo son la prevención de enfermedades, detectar y tratar a tiempo enfermedades tan habituales como la diabetes, la hipertensión o la artritis. Y por supuesto, no olvidarnos nunca de la salud mental y de garantizarnos un bienestar emocional significativo, que prevenga la depresión y nos ayude a construir relaciones sociales más sanas, en las que se mantengan vínculos significativos con nuestra familia, amigos y la comunidad que nos rodea.
En cuanto al rol de la sociedad para garantizar que los más mayores disfruten de un envejecimiento saludable está la responsabilidad de crear espacios seguros y accesibles que ayuden a las personas mayores a adaptarse al entorno y que se ajusten perfectamente a sus necesidades especiales.
¿Qué podemos hacer para tener un envejecimiento activo y saludable?
El primer paso para ir cumpliendo años y conservar nuestras capacidades prácticamente intactas pasa por mantenerse activo. Y la vía más sencilla para lograrlo es establecer de forma progresiva diferentes hábitos y estrategias que nos lleven hacia ese bienestar físico, mental y social que define al envejecimiento saludable. Como todo método y rutina se trata de un trabajo a largo plazo con el que las decisiones y sobre todo acciones que se realicen hoy van a impactar en nuestro bienestar futuro. Este compromiso con nuestro bienestar integral se traduce en varios aspectos como:
- No descuidar la salud física: siempre debemos realizar actividades físicas de diferentes intensidades como caminar (o incluso correr), nadar, bailar o estirar el cuerpo con el pilates o el yoga. El fortalecer los músculos y mejorar la movilidad impacta de manera evidente en la prevención de enfermedades. En este sentido, también es importante someterse a chequeos médicos periódicos, seguir una alimentación equilibrada, dormir entre 7 y 9 horas por noche para reparar y regenerar el cuerpo y la mente y reducir o incluso eliminar el consumo de tabaco y alcohol.
- Cuidar la salud emocional y mental: gracias a actividades como la meditación o el yoga podemos conseguir gestionar el estrés y la ansiedad, dos de los grandes males de la sociedad actual.
- Reforzar las relaciones sociales: seguro que en más de una ocasión habrás leído la mítica cita de Aristóteles, “el hombre es un ser social por naturaleza”. Y es que interactuar con diferentes personas, mantener el contacto con amigos y familiares y participar en actividades en grupo también es una forma de cuidar nuestra salud.
Beneficios de mantenerse activo
Frenar el deterioro físico es uno de los grandes éxitos de mantenerse activo que se suman a otros muchos beneficios para nuestra salud y bienestar integral, como pueden ser:
- Reforzar nuestra longevidad: una mayor calidad de vida siempre ayudará no solo a vivir más años sino a hacerlo con más salud. Al mantenernos activos, aumenta la esperanza de vida a lo largo de los años y sobre todo la autonomía en las capacidades físicas y cognitivas.
- Beneficios físicos: este aspecto es sin duda el más notable, ya que se consiguen amplias mejoras como la de la salud cardiovascular, el fortalecimiento de músculos y huesos y la prevención de la pérdida de masa muscular, el control del peso saludable, la prevención de enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2 o la hipertensión, el refuerzo del sistema inmunológico y la mejora del sueño, un hábito muchas veces infravalorado y que sin embargo ayuda al cuerpo a repararse día tras día.
- Beneficios emocionales y mentales: que el deporte mejora nuestra resiliencia y actitud vital no es ninguna novedad ya que el mero hecho de mantenernos activos va a conseguir que se afronten mejor los desafíos del día a día y la adaptación a los cambios. Y por supuesto, la actividad física, con su liberación de endorfinas también contribuye a reducir el estrés y la ansiedad, mejorar la memoria y la concentración y estabilizar el estado de ánimo.
Dicho todo esto, el camino a recorrer para proveernos un envejecimiento saludable y óptimo puede resultar algo arduo a priori pero una vez conquistada esta rutina nos estaremos haciendo a nosotros mismos el mejor regalo posible: cumplir años disfrutando de un estado físico que nos permita sentirnos fuertes, sanos e independientes para aprovechar al máximo nuestro día a día.
¡Te esperamos en nuestros centros GO fit para incorporar el deporte como hábito indispensable! No solo vas a conseguir mejorar tu fuerza, flexibilidad o resistencia sino que también se va a convertir en una cita clave para socializar, ampliar tu círculo de amistades y reforzar tu salud mental y emocional. Comiences a la edad que comiences, siempre será un buen momento porque contamos con actividades deportivas adaptadas a las necesidades y capacidades de cada etapa vital, un aspecto clave para evitar lesiones y maximizar los beneficios.
