Todos sabemos respirar, obviamente es un acto reflejo por pura supervivencia, pero con ejercicios como el Pilates aprendemos a controlar nuestro cuerpo y respiración consciente, ayudándonos a gestionar nuestra postura e incluso el estrés.
La atención a la respiración es uno de los principios característicos del Pilates y es que una respiración adecuada tiene más beneficios de los que inicialmente podemos creer. Si quieres animarte a empezar con esta modalidad, lee atentamente lo que te vamos a contar para que aprendas la técnica de respiración en Pilates.
¿Por qué es importante la respiración en Pilates?
El Pilates y la respiración van de la mano en esta práctica, ya que cada movimiento de este tipo de ejercicios debe ir correctamente acompasado con la respiración. Debemos saber que esta práctica tiene 6 principios, uno de ellos es la respiración que se articula de alguna manera sobre los otros cinco: el control, la centralización, la concentración, la fluidez de los movimientos y la precisión. Es por ello de la importancia de una correcta técnica en la respiración.
Sabemos que existen diferentes tipos de respiración (torácica, costal, diafragmática…) pero en Pilates nuestro objetivo es realizar correctamente la respiración costal ya que incide de manera directa sobre el transverso del abdomen, y el core es un pilar del trabajo de esta modalidad.
¿Por qué es importante la respiración en Pilates? Porque durante la inhalación en Pilates es el tórax el que aumenta su tamaño, llevando la respiración hacia el lateral de nuestras costillas, permitiendo que los músculos abdominales sigan activos, sin hinchar la zona abdominal. Si ocurre esto es un error que debemos evitar en el Pilates, ya que buscamos tener activo el centro de nuestro cuerpo todo el ejercicio y si permitimos que la zona abdominal se distienda al tomar aire, será mucho más difícil mantener fuertes los músculos abdominales y proteger nuestra columna.
¿Cómo es la respiración en Pilates?
La práctica de Pilates requiere, como ya hemos dicho, de una respiración concreta que permita mantener en todo momento el control de la faja abdominal, para no perder la activación del llamado core o power house. La respiración clásica de Pilates se realiza inhalando por la nariz, lo cual permite regular la temperatura del aire y la humedad, y se exhala por la boca, aumentando la resistencia con la que sale el aire y ayudando a activar el suelo pélvico y la faja abdominal. Te explicamos paso a paso como realizar correctamente la respiración en Pilates:
- Buscando la erogación de nuestra columna, como si nos estiraran de la coronilla y con mentón un poco hacia el pecho, debemos buscar llevar el aire durante el llenado hacia nuestras costillas, sintiendo que se expanden hacia afuera.
- Cuando estemos inhalando el aire no debemos dejar que llegue hasta la zona abdominal ni quedarse en nuestras clavículas, debemos concentrarnos en mantenerlo en la zona de nuestras costillas flotantes.
- Nos ayudará el mantener la contracción de nuestro suelo pélvico, ya que cerrará la zona inferior de nuestra pelvis.
- Al exhalar tenemos que sentir que hundimos el ombligo hacia atrás, hacia nuestra columna, y un poco hacia la zona superior.
- El transverso del abdomen también debe estar activo, reforzando la faja abdominal. Para saber si lo estas activando correctamente puedes poner tus manos sobre las cretas iliacas en la parte anterior y notarás como se activa durante la contracción.
- A la hora de coordinar la respiración con el movimiento del ejercicio debemos hacer coincidir la espiración con la parte de esfuerzo, ya que nos ayudará a proteger la espalda.
Ya estás listo para empezar a poner en práctica tus primeros ejercicios clásicos de Pilates y aprovecharte de los beneficios que te puede aportar, incluso si eres corredor. Pon tu atención en tu respiración y siéntete más libre en tus movimientos.
