Descubre cómo mantener la motivación cuando alcanzas tus objetivos de entrenamiento
El rol de los objetivos en el entrenamiento (y en la vida).
Tanto para el entrenamiento como para cualquier ámbito de la vida, establecer objetivos claros es muy importante para progresar y no rendirse ante cualquier obstáculo.
Los objetivos, especialmente cuando son específicos, realistas y medibles, son tus aliados para crecer y lograr lo que te propones y te mantienen motivado en el camino. La constancia y la perseverancia se vuelven fundamentales a la hora de sostenerlos. Son los objetivos los que te empujan a trabajar duro, mantenerte enfocado y esforzarte por lograr cosas que no parecen posibles cuando estas empezando. Incluso cuando no consigues alcanzar un objetivo por el que trabajas duro, aprendiste en el camino acerca del esfuerzo y la perseverancia.
Ahora bien, una vez que has alcanzado tus objetivos de entrenamiento: ¿qué sigue? Supón que te preparaste mes a mes para correr una media maratón y, llegado el día, con mucho esfuerzo y sacrificio, lograste completar la carrera. ¿Qué pasa después?
Esta es una pregunta que se hacen muchos deportistas y que aplica, como dijimos al principio, a muchos aspectos de nuestras vidas en las que nos ponemos objetivos que, un día, finalmente cumplimos. Hay mucha bibliografía disponible sobre establecer objetivos, sostenerlos e incluso alcanzarlos pero es poco lo que se habla acerca de lo que pasa una vez que se cumplen.
¿Qué hacer cuando alcanzas tus objetivos?
En general, lo que haces una vez que los alcanzaste está íntimamente relacionado a cómo llegaste ahí. Si tu camino fue gradual, fuiste adquiriendo hábitos y ajustando tu estilo de vida, es más probable que logres mantener en el tiempo lo logrado que si llegaste a la meta de forma más drástica o abrupta.
Aquí te dejamos algunos consejos para que no pierdas la motivación ni retrocedas en lo que conseguiste alcanzar.
- Tomate un momento para APRECIAR lo logrado
Si lograste correr o nadar, o caminar la cantidad de kilómetros que te habías propuesto, por ejemplo, lo primero que te aconsejamos es que te tomes un momento para conectar con la gratitud por lo logrado. No todos los días se alcanza cumplir con un objetivo claro y concreto, así que antes de sumergirte en el «qué sigue», detente y mira todo lo que has recorrido para llegar a donde estás hoy.
- CONECTA contigo mism@
Además de conectar con el camino que te trajo hasta ahí, fíjate cómo te sentiste recorriéndolo y cómo te sientes al haber llegado a la meta. ¿Fue más difícil de lo que creías? ¿Alguna parte del trayecto te costó más que otra? ¿Cómo sorteaste los obstáculos con los que te encontraste? Registrar estas cuestiones te permitirá conocerte mejor a ti mism@ y entender cómo funcionas cuando quieres alcanzar un objetivo. También puedes conectar con como te sientes ahora que lograste lo que te habías propuesto. ¿Te sientes realizado? ¿Sientes ansiedad por haber terminado con algo que te mantiene motivado?
- MANTÉN lo que alcanzaste
Si deseas mantener lo conseguido hasta ahora, no te detengas. Sigue entrenando para correr, caminar, nadar, practicar yoga o lo que sea que hayas elegido. La clave para una vida saludable es mantenerte siempre en movimiento así que busca dentro tuyo la motivación para continuar esforzándote por sostener lo que has logrado. Nunca pienses en ti mismo en términos de algo acabado, incluso aunque hayas conseguido alcanzar un objetivo por el que trabajaste mucho tiempo. Siempre puedes seguir mejorando.
- CAMBIA el enfoque
Si al alcanzar tu objetivo sientes que necesitas despejarte, es un gran momento para hacer algo diferente. Desafíate a probar cosas nuevas pero no tengas miedo en seguir haciendo lo que te gusta, si es que lo sigues disfrutando tanto como siempre.
- ESTABLECE nuevos objetivos
Con el objetivo logrado y la reflexión sobre el camino realizado, es momento de visualizar lo que sigue. Ningún objetivo, especialmente de entrenamiento, puede ser el final. Siempre hay algo más que puedes proponerte.
Como todo en la vida, el entrenamiento físico trata de crecer, mejorar tu salud y tu calidad de vida. Esto es lo que importa, más que alcanzar cualquier objetivo concreto. El secreto es disfrutar del camino y mantenerte motivado a mejorar.
Vive más y mejor, vive GO fit.